Control de velocidad: una perspectiva distinta que te puede ayudar a cumplir la ley y encontrar un beneficio en tu inversión
- khbalamu
- 24 sept
- 7 Min. de lectura
La voz de los transportistas: ¿por qué se niegan a instalar limitadores?
En conversaciones recientes con dueños de buses en Guatemala, la mayoría coincidió en que no quieren instalar dispositivos de control de velocidad, a menos hasta que todos lo hagan.Las razones principales fueron:
Alto costo de instalación (Q1,500 a Q3,000 por bus, multiplicado por la flota). Hay algunos transportistas con flotas grandes y la instalación de estos dispositivos en toda su flotilla representa una alta inversión, que no saben cómo la recuperarán.
Temor a dañar el motor por un mal manejo de los pilotos que fuercen el motor, a pesar de que ya no da para más.
Competencia desleal: debido a que algunos buses no tienen instalado el sistema limitador de velocidad, esto puede significar que algunos pasajeros prefieran estas unidades por ser más rápidas.
Este sentir muestra una desconexión entre lo que exige la ley y la práctica diaria en el transporte colectivo.
El impacto de los accidentes de tránsito en Guatemala
El costo humano y económico de los accidentes viales es enorme.Según el Boletín Estadístico de Seguridad Vial no. 06-2025 de la PNC, que se realiza mes a mes desde el 2011, por medio del Observatorio Nacional de Seguridad del Tránsito ONSET, los cuales se pueden encontrar en el siguiente enlace: https://transito.gob.gt/informes-y-estudios-estadisticos/, en una comparativa entre 2024 y 2025, el transporte colectivo tuvo un aumento en hechos pasando de 232 en 2024 (período de enero a junio) a 268 en el 2025 en el mismo período. Con respecto a los fallecidos hubo un incremento de 55 en 2024 a 87 en 2025 y lesionados hubo un decremento de 312 en 2024 a 297 en 2025.
Es cierto que las motocicletas causan mayor cantidad de accidentes y víctimas, por lo que también deberían existir controles más estrictos para ellas. Sin embargo, cada accidente de bus multiplica el número de víctimas y genera un impacto social y económico que no se puede ignorar, poniendo en la mira siempre que hay un accidente grave a los empresarios de buses.
Lo que dice la ley en Guatemala
La normativa nacional en su decreto 45-2016 indica lo siguiente:
Es obligatorio instalar un sistema limitador de velocidad a través de:
Una modificación mecánica en la bomba de inyección de los vehículos automotores ya sea accionada por mecanismos mecánicos o electrónicos. El límite máximo de velocidad es de 80km/h.
El costo no puede ser trasladado a los usuarios
Las modificaciones se debían realizar en un plazo máximo de 6 meses de entrada en vigencia de la ley (situación que no se ha dado por amparos que se han realizado a dicha ley)
Es obligatorio que el departamento de tránsito de la dirección general de la policía nacional civil les brinde un certificado de inspección
El obligatorio que el control de revoluciones por minuto del motor (tacómetro) y el control de velocidad del vehículo (aspirómetro), se encuentre en óptimas condiciones de funcionamiento
En teoría, toda la flota debería cumplir, pero en la práctica no se aplica al 100% y casi 10 años después de emitida la ley, todavía circulan buses y vehículos de carga a velocidades peligrosas.
Opciones disponibles en el mercado para el control de velocidad
Con el objetivo de brindar un panorama más amplio de las opciones que se tienen en el mercado, se realizó una búsqueda sobre que opciones hay para el control de velocidad y cuáles son las que se han implementado en otros países. A continuación, el listado completo:
Limitadores de velocidad:
Dispositivos que impiden superar los 80 km/h, mecánicos o electrónicos según el tipo de motor.
En el caso de motores mecánicos, se modifica la bomba de inyección para que al momento de llegar al límite de velocidad establecido, ya no llegue más combustible al motor y así evitar que se pueda superar el límite.
Para motores electrónicos existe un pedal electrónico que mide la velocidad y en base a eso, corta el envío de señal al motor desde el acelerador, o bien modificando la computadora del bus para evitar que se pueda manejar a velocidades por arriba del límite establecido.
Estos sistemas son requeridos en la mayoría de los países del mundo.
Tacógrafos:
Son dispositivos que se instala en vehículos de transporte —sobre todo buses y camiones pesados— para registrar de manera automática y continua datos de conducción.
Estos pueden llegar a registrar: Velocidad del vehículo en tiempo real y su historial, distancia recorrida, tiempos de conducción y descanso del piloto, eventos de exceso de velocidad, frenados bruscos, entre otras.
Existen de dos tipos: analógico y digital. Principalmente los tacógrafos digitales son los que se usan actualmente. Se utilizan cómo un complemento al sistema limitador de velocidad y ayudan a saber cómo se están manejando sus vehículos y en algunos países es obligatorio para tener evidencia en incidentes de tránsito. Los países donde se exige su uso, es en la Unión Europea principalmente.
Importante mencionar, que este dispositivo por si solo no cubre lo que solicita la ley en Guatemala, además de costar entre USD$1,000.00 a USD$1,500.00, pero es una alternativa que se usa en el mercado para controlar la forma de manejo de los pilotos y que puede traer beneficios para la empresa, para auditar cómo están manejando sus pilotos.
GPS con monitoreo en la nube:
Son dispositivos que se instalan en el bus, los cuales se conectan a la red de GPS global y que, en base a esto, van midiendo la velocidad, la cuál van registrando y enviando a un equipo en la nube para monitoreo del bus.
El GPS por sí solo no limita la velocidad, por lo que tampoco cumple con lo que indica la ley de Guatemala, pero permite generar alarmas automáticas a una central de monitoreo para tomar acciones cómo una llamada de atención al piloto, además de identificar desvíos de rutas que pueden ser un indicio de emergencia.
Pantallas visibles + alarmas:
Existen también algunas empresas en algunos países del mundo que han instalado en los buses un monitor de velocidad para que las personas vean en tiempo real, y puedan notificar de cualquier incidente por exceso de velocidad a una central de recepción de quejas.
Estos son sistemas que ofrecen algunas empresas solo cómo valor agregado, ya que no están legislados en ningún país y tampoco pueden garantizar que el bus no va a viajar a una velocidad mayor, pero pueden llegar a ser una alternativa dadas las circunstancias que se han presentado en el país.
¿Qué exigen otros países?
Unión Europea: limitadores obligatorios en buses y camiones, además de tacógrafos digitales.
India y Filipinas: limitadores de velocidad son requeridos en vehículos de transporte público.
Kenia: NTSA exige limitadores homologados para transporte público y carga.
Emiratos Árabes Unidos: limitadores en buses y transporte escolar.
Guatemala ya se alinea con esta tendencia, aunque todavía falta aplicar la ley en todo el parque vehicular.
Beneficios para los dueños de flotas
Al momento de implementar un sistema de control de velocidad, existen beneficios directos cómo la disminución de accidentes, ya que si el piloto no maneja a alta velocidad puede llegar a tener una mejor respuesta ante alguna emergencia en el camino.
Esta disminución en accidentes también se traduce en menos gastos legales y menos reparaciones, lo que conlleva por supuesto un ahorro, pero es muy difícil de medir y los dueños de flotillas grandes, puede que no puedan ver un retorno de su inversión con este rubro.
Existen algunos artículos que sugieren un ahorro en el combustible por instalar limitadores de velocidad, pero para algunos empresarios, esto puede significar un impacto negativo en un negocio paralelo de auto - venderse combustible, por lo que este no parece ser un beneficio real del sistema limitador de velocidad para algunos empresarios grandes.
También, algunos artículos sugieren a que los frenos y las llantas, al no estar expuestos a condiciones límites, no se desgastan tan rápido, lo que significa un beneficio en cuanto ahorro en estos insumos. Hoy en día, no existe un estudio que demuestre cuanto es el beneficio real de esto, por lo que sería importante realizar una prueba en un vehículo para medirlo.
Esos son los principales beneficios mencionados en algunos artículos, pero siguen siendo poco claros en cuanto al retorno de su inversión desde la perspectiva de los dueños de las flotillas.
Recomendación final
Debido a que la inversión de instalar estos dispositivos puede llegar a ser muy alta, si se cuenta con varias unidades, mi sugerencia es iniciar con un grupo de buses piloto para medir los beneficios reales, y mejor si lo complementa con un sistema de GPS para conseguir otros beneficios que potencien su inversión.
Esto lo puede promocionar cómo un compromiso de la empresa ante la sociedad para que las personas vean el esfuerzo que está teniendo con respecto a medidas de seguridad y cumplimiento de ley, y así las personas vayan ganando más confianza en su servicio.
Adicionalmente, en el grupo piloto, debería estar a prueba durante un tiempo considerable, permitiéndole identificar que tantos beneficios existen en las llantas y en los frenos, además si no cuenta con un negocio de venta de diésel, se sugiere ajustar la tarifa, para que por medio de esto pueda obtener un retorno claro de su inversión.
Cierre: da el siguiente paso
El control de velocidad es algo a lo que se le puede sacar provecho para iniciar a ganar más clientes, y se pueden buscar las formas de buscarle la vuelta para conseguir un retorno directo a su inversión y a la vez cumplir con la ley.
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